sábado, 31 de agosto de 2013

Refrito de una historia de amor


Después de haber leído Los enemigos de Sergio Magaña, de tener una lectura previa de Rabinal Achí y de ver a medias un vídeo de la obra de Magaña representada, surgen varios puntos de vista. Por ejemplo, en el vídeo el templo se ve muy españolizado, al igual que la indumentaria de los actores, entiendo perfectamente que esto se deba a que en esta representación se retome la petición del abate de Bourbourg. El personaje que sobresale tanto en el vídeo como en el texto es Rabinal, y no precisamente por ser el gran y valiente guerrero que es capaz de defender su nación y por su puesto a su amada; y vaya sorpresa que nos llevamos, Rabinal a pesar de estar recalcando su nombre nobiliario ante los tres funcionarios que solamente se la pasan burlándose de él, por un lado se encargan de hacerle creer que es fuerte para decirle después que no es nadie porque está pasando por encima de Hobot y lo que es peor, que Queché es mejor guerrero que él y que es gracias a los sabios consejos que le han dado es que venció a su enemigo Quehé. A eso, hay que sumarle el atuendo que presenta Rabinal en el vídeo, esas plumas tan coloridas y llamativas y la figura que forman, simulan el típico gorro que usan los bufones; y vaya que Rabinal era un objeto de burla para los funcionarios.

      El resto de los personajes (en Magaña) también da de qué hablar, por ejemplo Pilmama, que hace una referencia sobre la Conquista que no viene al caso, hace que el espectador se desubique un poco de lo que se supone es el eje central de la historia: el dilema de ¿ser o no ser feliz? Y ya que he tocado ese tema, hablaré de Mun, quien espera que alguno de sus enamorados la ame de verdad y que no la vea como un galardón. De alguna manera, quería romper con el estereotipo que en ese entonces predominaba en esa época: la mujer era un trofeo para el guerrero ganador; esta última, creía que contándole su amarga pena a Pilmama, ésta se haría menos y que sorpresa, resulta que esta mujer esta ha favor de que la mujer sea considerada un trofeo, prácticamente nos dice que para eso están en la tierra. Y Queché, que a pesar de ser catalogado como el mejor guerrero y el hombre que ama Mun, no es capaz de valorarla en el sentido de que él también la ve como trofeo, pero sí es capaz de dar un último combate, el cuál por un momento se cree que va ganar pero desgraciadamente no, y que bien que no lo gana, porque sino estaríamos frente a una típica telenovela, aunque quizá ello esté en duda, porque los lamentos de Mun parecen de la gran protagonista de una de ellas y Pilmama, la nana que crió a todos sin pedir nada a cambio y Rabinal, el guerrero débil por dentro pero con el conflicto de mostrarse como divo ante todos. 
   
          En los dos textos se aplica lo que Fernando de Toro ha propuesto, dos formas de abordar un mismo texto: visto en escena y la otra de manera literaria. Rabinal Achí (el texto) no está adaptado como una obra teatral como tal, no se puede leer de esa manera, resulta muy difícil debido a los discursos tan largos, repetitivos y que hacen que la acción se vuelva lenta; la representación puede ser muy larga. Mientras que Los Enemigos, si aplica para las dos opciones. En este caso el texto espectacular es el de Magaña, puesto que ha sido puesto en escena y no sé si afortunadamente no cuenta con tantas didascalias que pueden distraer al y espectador; por lo anterior no deja de ser un texto dramático a la vez. Rabinal Achí, es mejor analizarlo como texto dramático y así se descubren muchos aspectos.

        Como conclusión creo que Magaña se dio a la tarea de retomar una historia épica y convertirla casi en una de las famosas telenovelas de Televisa, supuso que iba ser igual de magnífica que Los signos del zodiaco (1950) y que otro productor iba llevar al cine uno más de sus textos.

sábado, 17 de agosto de 2013


El Quetzalcoatl moderno


La mayoría de la gente, especialmente la que es creyente del catolicismo, tiene la ferviente esperanza de que un día (no saben cual), el Mesías va llegar a la tierra y va librar de pecado a todos los que creen en él. Pero el gran enigma es ¿cómo es su aspecto? Nadie lo sabe, solamente se saben suposiciones, por ejemplo, la que tenían los antiguos pobladores de México; ellos esperaban el regreso de su dios Quetzalcoatl, pero al no tener una imagen de él, no sabían cómo era, así, que el día en que los españoles llegaron montados sobre caballos, los creyeron seres superiores, o mejor dicho, una de las posibles transformaciones que realizaba Quetzalcoatl y por lo tanto, se rindieron a sus pies.

      No se conoce a ciencia cierta cuál fue su aspecto físico, pero el que es más comercializado es que fue un hombre de piel blanca, ojos claros, alto, con barca y con cabello castaño claro. Y viendo estas características, son muy similares a los rasgos de Hernán Cortés cuando llegó a México.  Así que si en estos días aparece cualquiera con alguna de estas similitudes, no faltara quienes crean que ante sus ojos está el verdadero Mesías que los librará de todos sus pecados.

     Quizá los dos párrafos no sean tan relevantes, pero para mí sí lo son, después de haber leído y comentado en clase la obra de teatro de Luisa Josefina Hernández llamada  Quetzalcoatl, que de acuerdo con la autora, tiene un fin didáctico. Estoy totalmente en desacuerdo con lo anterior, puesto que si la obra es leída por un espectador cualquiera, le van a quedar "huecos", es decir, no va lograr identificar quién es tal personaje, o tal lugar. Me parece que es una obra que va dirigida para aquellos que tienen conocimientos sobre Literatura, Historia y Antropología, puesto que la lectura para ellos se vuelve muy ágil. Y por lo tanto, está en un gran error en decir que es didáctica. El posible fin didáctico implícito que tiene es en la parte final, cuando salen a escena el maestro, el fraile y los alumnos, y hacen referencia que un día, a final de cuentas, va llegar el Mesías.

     En clase no alcancé a comentar algo sobre los huesos que Quetzalcoatl va a buscar: los de hombre y mujer, que a partir de ellos se iban a crear a los seres perfectos. Recordemos que al Nagual se le caen y se mezclaron; cuenta la leyenda o mito, que es a partir de esa mezcla cuando surgen las diversas preferencias sexuales. Cierto o falso, tiene algo de lógica.
 
      Debo advertir a mis futuros lectores que me declaro enemiga de la teoría y espero no defraudarlos cuando emita algún comentario relacionado a ella; y escribo esto porque en esta ocasión ha llegado el turno de hablar de Anne Ubersfeld, titulado Semiótica teatral relacionándola con la obra teatral que tocó leer para esta semana y también con posteriores, la teoría siempre va estar como nuestro auxiliar para lograr un entendimiento mejor.
   
       El sistema de signos es lo que predomina en la obra de Hernández y que es de suma importancia para Ubersfeld en su texto anteriormente citado. Todos esas imágenes (signos) de que se mencionan a lo largo del texto, están cargados de significados pero vuelvo a lo mismo, no todos van a lograr entenderlos al momento en que sea representada la obra, si al momento de leer el texto, el lector se ve obligado a realizar una pausa y buscar qué son, teniendo como resultado una lectura cansada y enriquecedora a la vez.

domingo, 11 de agosto de 2013



¿Quién dijo que las gordas eran feas?
Salvador Novo, nacido en la Ciudad de México en 1904. Ya tenia conocimiento de la obra de este autor, pero solamente a su obra poética, dejando a un lado la teatral. Poco antes de que cumpla un siglo de haber nacido, llega a mis manos su obra teatral titulada La guerra de las gordas o In pipiltzintzin. La obra se sitúa poco antes de la llegada de los españoles a México, y nos cuenta la enemistad entre dos reinos y el martirio que tiene que pasar Moquíhuiz, rey de Tlatelolco, ya que no amaba a su esposa por ser una mujer plana, extremadamente delgada y con la que no era capaz de tener sexo. Su debilidad o lo que lograba excitarlo más eran las mujeres con sobrepeso, y más aún sí dichas mujeres todavía eran doncellas.

     A pesar de que la obra se ubica en 1475, los actores en sus diálogos emplean conceptos de la época en que fue representada, 1963, por ejemplo, cuando hacen referencia a Cuba, a la clínica, etc. Un hecho insólito en la obra, es el supuesto nacimiento de diez niños por parte de la esposa de Axayácatl, quien ya era una mujer de avanzada edad, que nunca dio muestras de estar embarazada, pero de la nada un día decide dar a luz a tanto niño. Obviamente todo se trababa de un engaño y digamos que la idea funcionó un poco, tanto que la esposa de Moquíhuiz, Chalchiuhnenetzin quería hacer lo mismo con su marido pero solamente se quedo en eso, una idea guajira. 

     Moquíhuiz planea utilizar como arma de guerra no un instrumento muy común: a sus prisioneras gordas; la idea era muy simple, desnudarlas y que se presenten ante los enemigos, quienes, no se podrán resistir ante semejantes encantos y cuando éstas accedan a sus peticiones o viceversa, las mujeres encontraran el momento perfecto para poder aplastarlos y así el enemigo quedará eliminado. Afortunadamente, dicho plan no se puso en pie.

     No estoy totalmente de acuerdo de que la mujer sea planeada para usarse de la manera anterior, a pesar de que no se llevo a cabo; me parece que la denigra. Pero, con lo que sí estoy de acuerdo es que sean el símbolo sexual dentro de la obra, las que mayor placer provoquen en los hombres; pero sí en cambio digo, que estoy de acuerdo con la idea que la obra da de las mujeres delgadas, me van a odiar unos cuantos de los lectores que lleguen a este blog. Así que por lo tanto, exageró un poco Moquíhuiz al dar la descripción de su esposa, especialmente con el asunto del mal aliento, posiblemente la mayoría de los habitantes lo padecían, puesto que en esa época aún no existían tantos métodos de higiene bucal. 




Juan Rana

Nombre artístico de Cosme Pérez, quien fue un actor de la época conocida como "los Siglos de oro" en España; y es justamente en dicho periodo, cuando el teatro de corral surge y se hace sumamente famoso. Su físico le ayudó a adquirir su nombre artístico, ya que sus extremidades estaban en contraste con su abultado estómago y espalda, al igual que las ranas. Y vaya que supo sacar provecho de lo anterior, y para muestra de ellos están las obras que el montó y las que se escribieron para él.

     En esta ocasión en la clase de "Teatro mexicano" tuvimos la oportunidad de conocer a este personaje (aclaro, que anteriormente tomé dos clases de Siglo de oro y no lo mencionaron) y no precisamente gracias a un dramaturgo español, si no a uno mexicano: Emilio Carballido, nacido en Córdoba, Veracruz en 1925. Su historia la llama El desafío de Juan Rana, es muy breve, y nos relata el dilema en que se encuentra Juan Rana: la infidelidad tan obvia por parte de su esposa. Rana se presenta como un personaje dócil, temeroso y hasta un poco resignado. La más inteligente es la esposa, llamada Gila, puesto que se casa con Juan y a los tres meses de matrimonio nace un niño que Juan cree es su hijo; el espectador deduce que es obra de una infidelidad. Aquí surge una pregunta: ¿Juan es muy tonto o definitivamente está resignado ante su situación? Desde mi punto de vista me inclino más hacia la segunda opción, puesto que un hombre con el aspecto de "rana" no le es nada fácil conseguir mujer que desee estar a su lado el resto de su vida y es capaz de aceptar todos los defectos que ésta tenga.

    Por el resto de los personajes que son dos: el Alguacil y Gil Parrado; Gil Parrado es con quien riñe Rana, pero es una riña tan absurda, pues Rana le da de zapatazos y ya se cree muy valiente por su acto; acto seguido, aparece en escena el Alguacil, quien está dispuesto a llevarse preso a Juan, pero Gila interviene oportunamente diciéndole: "¡Por vida del hijo tuyo, que, ya ves, es hijo nuestro, te pido que no lo aprendas! Finalmente Rana no va preso y todos terminan muy felices contentos y bailando.

     Es muy fácil apreciar que Juan sabía su realidad pero prefería evadirla y seguir fingiendo. Vaya que en la actualidad aún hay gente que le da por evadir su realidad para sobrevivir o aparentar llevar una vida normal. Afortunadamente Carballido retoma este personaje y logra robar risas a los nuevo lectores.

miércoles, 7 de agosto de 2013


 Este blog ha sido creado con el fin de conocer un poco más del teatro que nació y nace en México. Aclaro, no soy la gran aficionada al teatro.